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Refrigeración líquida: el nuevo estándar para infraestructura crítica que soporta HPC e IA

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Robson Pacheco, Gerente de Ventas de Centros de Datos en Vertiv Brasil, tiene una sólida formación en la industria de fabricación eléctrica y electrónica.

Ecuador | La computación de alto rendimiento (HPC), el streaming, el aprendizaje automático y la inteligencia artificial (IA) están impulsando una convergencia tecnológica sin precedentes. Hace apenas una década, los racks de TI consumían entre 1 y 10 kW; hoy, con la llegada de chips de alto rendimiento y arquitecturas específicas para IA, pueden superar fácilmente los 100 kW por rack. Este salto en capacidad también implica un reto crucial: cómo disipar el calor generado por estos sistemas cada vez más densos y potentes.

De los ventiladores al agua: el cambio necesario

Los aceleradores de IA, como las GPUs y TPUs, generan densidades térmicas extremadamente altas que superan los límites del enfriamiento por aire tradicional. La salida de calor puede alcanzar cientos de vatios por centímetro cuadrado, lo que hace insuficientes los ventiladores y disipadores convencionales.

Frente a esta realidad, el enfriamiento líquido se perfila como la solución más eficiente. Según explicó Diego Corceiro, gerente de ingeniería mecánica en LZA, en el podcast “What’s Next? with Vertiv”, el agua tiene una conductividad térmica muy superior al aire, lo que la convierte en un medio ideal para disipar calor en entornos de alta densidad.

El sistema directo al chip, donde el fluido circula por placas frías que distribuyen el enfriamiento directamente sobre los procesadores, permite mantener temperaturas operativas óptimas, reducir el consumo energético y mejorar el rendimiento general.

Beneficios del enfriamiento líquido

Adoptar esta tecnología trae ventajas claras para los centros de datos:

  • Mayor eficiencia térmica: mejor transferencia de calor y menor riesgo de estrangulamiento térmico.
  • Ahorro energético: hasta un 30% menos de consumo en infraestructura de enfriamiento.
  • Escalabilidad modular: ideal para proyectos que crecen por fases.
  • Menor huella física y ruido: sistemas más compactos y silenciosos.

Aunque el enfriamiento líquido avanza rápidamente, el enfoque híbrido (combinación de aire y líquido) sigue siendo el más viable actualmente. Vertiv observa que muchas instalaciones ya combinan filas con racks de enfriamiento líquido junto a sistemas tradicionales como CRACs y AHUs, diseñados para controlar temperatura y humedad.

Claves para una estrategia efectiva de enfriamiento líquido

Para quienes planean construir o modernizar un centro de datos, Vertiv recomienda cuatro pasos esenciales:

  1. Estudiar el mercado: conocer las cargas y necesidades de los clientes para evitar la obsolescencia temprana.
  2. Diseñar con visión: aprovechar la posibilidad de reducir racks y concentrar capacidad, planificando la infraestructura mecánica, eléctrica y civil desde el inicio.
  3. Prepararse para el futuro: integrar el enfriamiento líquido desde la fase de diseño, considerando los requisitos térmicos y de eficiencia.
  4. Entender al cliente: definir si el enfriamiento líquido será total o parcial, y calcular un retorno de inversión realista.

Los centros de datos existentes también pueden adaptarse, aunque el proceso requiere revisar la infraestructura eléctrica, los sistemas de automatización y la capacidad estructural del edificio.

Un futuro impulsado por la IA

Con el crecimiento de la IA, el HPC y el streaming, la demanda térmica seguirá aumentando. El enfriamiento líquido llegó para quedarse, ofreciendo una ruta sostenible hacia centros de datos más potentes y eficientes.

En Vertiv, los equipos de productos y servicios brindan soporte integral para la gestión térmica —desde sistemas de enfriamiento por aire y líquido hasta el rechazo de calor externo—, además de servicios de monitoreo remoto, mantenimiento preventivo y soporte técnico para mantener el rendimiento óptimo de cada instalación.